martes, 25 de diciembre de 2007

LA EXTINCIÓN DEL LOBO IBÉRICO EN CASTILLA Y LEÓN, SOBRE TODO AL SUR DEL DUERO.


En las últimas fechas se ha anunciado desde la Junta de Castilla y León la caza de casi 200 de ejemplares de lobo ibérico anualmente. Esta cifra llama la atención sobre todo en el caso los ejemplares situados al sur del Duero, pues la Directiva Europea 92/43 CEE, impide la muerte de la especie en este espacio de reciente recolonización. El problema actual se centra en que la adinistración pretende dejar sin aplicación este aspecto de la directiva.
El cambio de actitud contra el lobo ibérico promovido por la Junta y con el beneplácito del Ministerio de Medio Ambiente puede suponer que la especie deje de estar presente en Castiilla y León sobre todo al sur del Duero. Desde la Asociación Geográfica Ambiental se piensa que esta nueva medida es un sin sentido, pues una población escasa como a actual no aguantará mucho un número tan elevado de ejemplares abatidos.
La compatibilidad de la presencia del lobo y de la cabaña ganadera debería suponer un ejemplo de convivencia que es posible como se ha demostrado en territorios del norte peninsular, sobre todo porque ambos son necesarios y han formado parte desde tiempos pasados del paisaje de Castilla y León, comunidad que no debe perder estas señas de identidad.
Para garantizar la presencia del cánido se deben fomentar y adecuar políticas de subvenciones que permitan a los ganaderos hacer frente a las pérdidas por las posibles muertes que puedan producirse, algo por lo que la Junta debería apostar más en serio, pues en la actualidad las ayudas se cobran tarde y mal.
En lo que debe estarse de acuerdo es que una de las mayores amenazas que hoy en día se ciernen sobre el lobo y el ganado, es en la proliferación de nuevas urbanizaciones que minimizan el espacio disponible, tanto para la fauna silvestre como la doméstica. Es por ello por lo que desde la Asociación se expone la necesidad de luchar contra las políticas pro cinegéticas y urbanísticas de la Junta, para continuar viendo en nuestros campos a uno de los mayores exponentes de la fauna ibérica y al ganado pastando.


NO AL AVE, SI A LA MEJORA DEL FERROCARRIL Y AL PROGRESO DE NUESTROS PUEBLOS

En estas fechas mucho se está hablando del ferrocarril en nuestra provincia. Desde la Asociación Geográfica Ambiental, vamos a exponer nuestro punto de vista, de manera razonada, como intentamos hacer en todas las investigaciones que realizamos.
En primer lugar nos oponemos a la llegada del AVE a nuestra provincia, pues el supuesto beneficio de su llegada y en concreto a la capital tan solo favorecería a las empresas constructoras adjudicatarias y a las arcas municipales, pero no a la gran mayoría de los ciudadanos, pues en primer lugar el coste del billete de AVE es muy superior al del ferrocarril tradicional que opera en nuestra provincia, al cual pueden acceder un gran número de ciudadanos, que sin embargo no podrían permitirse el lujo de pagar todos los días estos billetes para desplazarse, por ejemplo, hasta su lugar de trabajo como ocurre en la actualidad.
Pero esta no es la única causa para oponernos a la llegada del AVE. Diferentes estudios exponen que solo la construcción de un kilómetro de AVE, en terrenos con pocos accidentes orográficos, cuesta, unos 12 millones de euros. Esto supone que en los tan solo 20 kilómetros que atravesaría nuestra provincia, suponiendo que se hiciese un ramal del AVE Madrid-Segovia y llegase hasta la capital costaría un mínimo de que rondaría los 250 millones de euros. Este dinero como es lógico solo tendría un municipio beneficiario, la capital, pues es el resto de los conforman la provincia tan solo verían pasar el AVE, allí donde lo haga, además de como se esfuma una cantidad de dinero que bien podría destinarse a la mejora de los mismos, al concentrarse aún más los flujos económicos en la capital, lo que repercutiría en un mayor éxodo rural hacia Ávila, propiciando el asentamiento en sus alrededores de un mayor número de personas, lo que haría perder el relativo, si bien cada vez menos, ambiente tranquilo del que gozan sus ciudadanos.
Junto a lo ya expuesto en el ámbito económico estarían los impactos ambientales del paso del AVE, por el espacio con un trazado más que probable. Así afectaría a los LICs y ZEPAs de los Encinares del Adaja y el Voltoya, Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos y en menor medidas, pues determina el límite provincial con Segovia a los Valles del Voltoya y el Zorita. Esta afección se sumaría a la de la fauna al no ser una infraestructura permeable, fomentando el efecto barrera, aislando y fraccionando sus poblaciones. Otro impacto vendría motivado por el consumo eléctrico que sería parecido al de las poblaciones de las más grandes de la provincia como Arévalo o Arenas de San Pedro, generando más CO2 y la proliferación de líneas de alta tensión.
Pero desde la Asociación Geográfica Ambiental, nos gusta mediante la pedagogía ambiental aportar soluciones o simplemente opciones más coherentes, partiendo todas ellas de las inversiones que se podrían hacer si el dinero del AVE se dedicara a otros fines. A pesar de comentar que la única beneficiada con la llegada del AVE sea la capital y estar en contra, no nos oponemos a que la capital tenga mejoras y sobre todo que estas lleguen a un mayor número de ciudadanos. Por eso proponemos que la mitad del costo que supondría el AVE se invierta en la mejora del ferrocarril actual, con mejoras en el trazado ferroviario que permitan circular trenes rápidos, de velocidades cercanas a los 200, y en la estación de Ávila, todo ello sin apenas costos adicionales en el precio actual de los billetes. Hemos de recordar que la llegada del AVE, supone siempre la merma del resto del servicio ferroviario y la pérdida de más empleos globales que los que genera su llegada. Junto a esta medida proponemos, pues de eso depende el progreso conjunto de toda la provincia, que la otra mitad del dinero que costaría la llegada del AVE, se invierta en proyectos, sociales, ambientales y empresariales, en todos los municipios de la provincia, fomentando el desarrollo rural de todos ellos. Tocarían en caso de poder repartirlo por igual a cada municipio a medio millón de euros, mientras si por ciudadano a 745 euros de inversión por cabeza.
Esperemos que la aportación de todos estos datos, siempre objetivos, sirvan para disuadir de sus pretensiones a aquellos que enfervorecidamente defienden el AVE, aún a sabiendas, como aquí ha quedado demostrado, que no es ni mucho menos el mejor de los medios de transporte, desde el punto de vista económico, social y ambiental.

LA HUELLA ECOLÓGICA DE LA PROVINCIA DE ÁVILA ESTÁ A PUNTO DE SUPERAR LA CAPACIDAD DE CARGA DEL MEDIO

Muchos estudios han sido los que se han realizado sobre el medio ambiente de la provincia de Ávila. Este novedoso de la Huella Ecológica del Ser Humano en nuestra provincia ha sido realizado por la Asociación Geográfica Ambiental, partiendo de la definición de desarrollo sostenible, que es “aquel desarrollo que satisface las necesidades actuales sin poner en peligro la capacidad de las futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades”. A partir de este concepto la huella ecológica se define como “el área de territorio ecológicamente productivo (cultivos, pastos, bosques o ecosistemas acuáticos) necesaria para producir los recursos naturales utilizados y para asimilar los residuos producidos por una población determinada con un nivel de vida específico de forma indefinida, sea donde sea que se encuentre este área”. Así la huella ecológica es muy útil para comparar el área geográfica ocupada por la población con el área natural necesaria para mantener dicha población indefinidamente, si bien a veces la consideración de ciertos parámetros medioambientales y su extrapolación a hectáreas de terreno, resulta complicada.
Una vez expuestas estas ideas preliminares, en el estudio para la provincia se tuvieron en cuenta su superficie, 8.050 Km2 , su población 167.818 habitantes (datos del INE 2006), su densidad de población actual, 21 hab/ Km2 y una serie de parámetros ambientales. Con esta situación, según informes de Redefining Progress, la huella ecológica de España actualmente se estima en 4,7 hectáreas al año. Así, al multiplicar el número de habitantes de la provincia por la Huella Ecológica de cada uno (según la media nacional de 4,7 hectáreas al año), el resultado es de 7.887 Km2/ año.
A partir de estos datos, el estudio muestra que la población de la provincia de Ávila tiene una huella ecológica del 97,9 % respecto al área geográfica que ocupa, quedando solo un 2,1 % del territorio para el resto de seres vivos que existen en la provincia o lo que es lo mismo 163 Km2. A pesar de estos datos poco alagüeños, pues estamos casi al límite de la capacidad de carga del medio, si los comparamos, por ejemplo, con los de la vecina Segovia, muestran que en nuestra provincia son más favorables pues en aquella el ser humano consume más del 100% del territorio, teniendo un déficit ecológico.
Si por el contrario, según la Asociación el análisis provincial se hiciese en relación a la capacidad de carga del planeta (1,75 hectáreas por persona al año), el resultado podría considerarse como desalentador, pues para mantener el ritmo de consumo actual el estudio concluye en que no habría más remedio que reducir la población de la provincia a 61.848 personas, es decir una densidad provincial equivalente de 7,68 hab/ Km2.
La conclusión que muestra la Asociación Geográfica Ambiental con este informe, es llamar la atención de que a pesar de la teórica buena calidad ambiental de la provincia de Ávila, no solo deberían tenerse en cuenta, en los modelos de desarrollo la variable económica, pues debería estudiarse también si estos son sostenibles a largo plazo, según los hábitos de consumo actual. Eso sí, recalcan que Ávila muestra uno de los resultados más esperanzadores a nivel nacional, haciéndonos un llamamiento para mantenernos en este lugar de privilegio.

LOS CAMPOS DE GOLF DE LA MACROURBANIZACIÓN DE VILLANUEVA DE GÓMEZ AFECTARÁN A LAS NÁYADES O ALMEJAS DE AGUA DULCE

El proyecto de la macrourbanización de Villanueva de Gómez con sus tres campos de golf asociados es posiblemente el mayor impacto ambiental hasta la fecha realizado en la provincia de Ávila a pesar de contar con informes negativos de técnicos de la propia Junta que la tachan de sinsentido y despropósito desde el punto de vista de la ordenación del territorio y del medio ambiente, según informaciones del Diario “El País”. Esto es debido a la ya conocida tala de más de 120.000 pinos maduros una vez esté finalizado el proyecto, pues según el alcalde del municipio la densidad del pinar es de 150 pinos por hectárea y 800 has las que se verán afectadas. La tala conllevará la desaparición de un sin fin de especies animales, la gran parte protegidas, entre las que destaca el águila imperial y otras aves rapaces.
Pero además de estas especies existen otras en grave peligro de extinción por ser unas grandes desconocidas dentro de la fauna ibérica. Desde la Asociación Geográfica Ambiental se destaca igualmente la grave afección a la que se verán expuestas las náyades o almejas de río, en concreto dos de sus especies, el Unio cf. pictorum y la Anodonta cf. anatina. Los datos de su segura presencia son fácilmente constatables, pues además de numerosas citas de científicos abulenses, existe un manual realizado a través de un proyecto Life de la Unión Europea en el que participa la Junta de Castilla y León, cooeditora del libro, lo que refleja la importancia de las especies aquí citadas.
Las medidas correctoras que se incluyen en la desafortunada Declaración de Impacto Ambiental del día 17 de octubre no son nada más de un mero parche en lo referente a la gestión de los recursos hídricos, pues no aportan nada nuevo a lo que obliga La Ley de Aguas en relación a la protección y por tanto no afección de la zona de servidumbre y policía de los ríos.
Según queda claro el promotor demanda casi un millón de metros cúbicos para todo el proyecto. Esto independiente de donde se extraiga, de superficie, cosa más que probable o de manera subterránea, cosa muy difícil por la altas tasas de arsénico que impide beber a los propios habientes del municipio, llevará asociada dos consecuencias, la disminución del caudal del Adaja, ya maltrecho desde la construcción del embalse de Las Cogotas, y la merma de calidad de las aguas. A su vez se producirá la pérdida de los peces presentes en el río. Esta situación será la causante de la desaparición de las náyades presentes en estas agua, lo que causará un grave impacto ecológico en la cuenca del Adaja. Se debe a que las náyades necesitan para su reproducción de estos peces y a su vez estos peces necesitan de las náyades para su supervivencia pues son unos excelentes filtradores de las aguas donde se encuentran, mejorando la calidad de las mismas. A parte de este impacto sobre los peces, sufrirán directamente el producido por la contaminación de las aguas. Sirva un dato objetivamente contrastado por científicos del CSIC como Rafael Araujo para entender la gravedad del problema, una de estas almejas de río puede filtrar 50 litros de agua al día.

SOBRE LAS NORMAS URBANÍSTICAS Y LA GESTIÓN FORESTAL SOSTENIBLE DE CEBREROS.

El crecimiento urbanístico que planea el Cebreros es claramente insostenible, por estar protegido el municipio bajo las figuras de LIC y ZEPA en un 87% de su superficie, por la forma en la que va a crecer, por el emplazamiento en el que se va a llevar a cabo y por llevar un campo de golf asociado en detrimento de otros servicios públicos más necesarios para cualquier población.
Desde la Asociación Geográfica Ambiental no nos oponemos al crecimiento urbanístico del municipio siempre y cuando sea necesario y respetuoso, cosa que puede serlo en Cebreros como en cualquier otro. Para ello proponemos un cálculo muy sencillo para estimar el crecimiento que debe registrar un municipio. Se parte del porcentaje de población joven existente en la actualidad y con posibilidades de independizarse. Ese grupo de edad, que iría aproximadamente entre los 20 y los 40 años comprende en la actualidad 830 personas (según datos del INE), que serían las que en caso de quedarse todas ellas en el municipio necesitarían una vivienda. A una media en un principio de 2 personas por vivienda la necesidad de la misma, siempre y cuando todos los jóvenes del municipio decidan quedarse en el mismo estaría cifrada para los próximos 20 años (diferencia de años entre los rangos de edad anteriormente señalados), en 415 viviendas, pudiendo ascender hasta las 500 si alguien de fuera desea asentarse en el municipio.
Considerando la hipótesis de la construcción de las 500 viviendas y a una media final de 4 personas por vivienda, la pareja y dos hijos, que suele ser lo más usual, esto llevaría a un incremento de la población de 2000 personas, una cifra que sí sería asumible por los recursos naturales del municipio, compatibilizando la conservación de los mismos sin menoscabo de un deseado desarrollo.
Lo que no es compatible en estas normas urbanísticas es pues, la enorme cantidad de viviendas proyectadas y la dispersión de las mismas, al situarse 3500 al margen del núcleo tradicional, pues este hecho constituye un elemento claramente especulativo, pues en un futuro la siguiente propuesta será unir los dos núcleos urbanos y por tanto la construcción de más viviendas.
Además desde la Asociación invitamos a la Confederación Hidrográfica del Tajo a no autorizar usos del agua que no sean los estrictamente necesarios para un número de viviendas acorde con la población que demanda el municipio, debiendo igualmente desestimar cualquier uso que vaya dirigido a la construcción de un campo de golf fuera de toda lógica.
Lo que sí pedimos desde la Asociación es que las administraciones se impliquen en la conservación de los espacios naturales dotando a los municipios que los posean, de partidas presupuestarias adicionales que permitan un desarrollo que sea compatible con la conservación de la naturaleza, al poseer singularidades que otros no poseen y que merece la pena conservar. Estas dotaciones deberían ir encaminadas a una mayor dotación de servicios sociales y a impulsar la creación de pequeñas industrias que se beneficien de la presencia de un entorno privilegiado que ha de ser seña de calidad de muchos de nuestros municipios y un orgullo para los mismos que merece la pena conservar para que disfruten de él las futuras generaciones. Medidas como las propuestas por la Junta para la mejora forestal también serían un buen aliciente, siempre y cuando estas tuvieran fines realmente sostenibles, pues la apertura de nuevas pistas y el asfaltado de otras, además de no mejorar los usos forestales, producen impactos negativos en la fauna fraccionando su espacio vital y aumentando el nivel de ruido por un mayor tránsito de vehículos para estos espacios.
Algo similar al caso de Cebreros sucede en el Valle Amblés en el muncipio de La Serrada, si se ejecuta el Plan Parcial, “La Ladera” (ver Boletín Oficial de la Provincia de 8 de Octubre de 2007) en donde están previstas la construcción de 244 viviendas en un municipio que, tan solo cuenta con 131 habitantes en función de las cifras del INE, con lo que en caso de ocupación de todas sus viviendas, podría pasar de ser uno de los municipios más pequeños a uno de los más poblados del Valle Amblés. Su ubicación está además prevista en un espacio con una topografía que como su nombre indica está marcada por una considerable pendiente y a unos 5 kilómetros del LIC y ZEPA de los Encinares de la Sierra de Ávila.
Además por último, y como aspecto más importante animamos desde la Asociación Geográfica Ambiental a que todos los municipios de la provincia de Ávila apliquen el modelo de urbanístico tan sencillo, fácil y respetuoso como el aquí propuesto, pues ese sí garantiza el tan ansiado, compatible y sobre todo posible desarrollo sostenible, en el que las personas, los animales y las plantas juntos tienen cabida.

NO A LINEA DE ALTA TENSIÓN EN EL VALLE AMBLÉS

Muchos son los impactos que está sufriendo en los últimos tiempos la provincia de Ávila. Hasta ahora todos los que se han conocido han estado relacionados con el medio ambiente e indirectamente con el ser humano, pero con este de la línea de alta tensión en el Valle Amblés, se junta el impacto ambiental con los que pueden darse sobre la salud de las personas.
El problema del impacto aquí tratado viene dado por la proliferación de parques eólicos en la Sierra de Ávila, los cuales solo requieren Evaluación de Impacto Ambiental en función de lo recogido en la normativa estatal (a partir de 50 aerogeneradores) y no por la normativa autonómica a pesar de tener la Junta de Castilla y León potestad para haber aplicado en su normativa criterios más estrictos. Estos parques eólicos tienen tres aspectos negativos por uno positivo. Los negativos tienen que ver con las afecciones a las aves por el choque con sus aspas, con pérdida de los valores estéticos del paisaje que lo rodea, muy cercanos al LIC y ZEPA de los encinares de la Sierra de Ávila y con las afecciones en el suelo y la vegetación debido a la apertura de nuevas pistas en su instalación. Por el contrario como impacto positivo está el que es una fuente de energía renovable, pero como puede observarse no tan positiva como la solar.
Ahora bien, si encima a consecuencia de su ubicación se pretende para el transporte de la energía generada, el realizar una línea aérea de alta tensión por el Valle Ambles y no soterrarla, estamos ante un proyecto a todas luces insostenible y que desde aquí recordamos necesitaría en caso de ejecutarse Evaluación de Impacto Ambiental, según lo recogido en la Ley 11/2003, de 8 de abril, de Prevención Ambiental en Castilla y León en su Anexo IV y sobre todo por expuesto en la legislación estatal en el Anexo I, Grupo 9, pues atraviesa el LIC de la ribera del Adaja. A continuación enumeramos el porque no debe llevarse a cabo este proyecto detallando los impactos sobre la salud y el medio ambiente que conllevan tendidos eléctricos como el que se propone:
1. Aparición de enfermedades como el cáncer según lo expuesto por la Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) de la Organización Mundial de la Salud (2001), por el Instituto de Karolinska de Estocolmo, por la Universidad de Oxford (2005) por el Departamento de de los Servicios a la Salud de California (2002) y por la Universidad de Denver (1979) destacando los altos índices de leucemia infantil. Este y otros estudios llevados a cabo por organismos independientes, algunos de los cuales son accesibles a través de Internet, se realizaron teniendo en cuenta la distancia del domicilio de un grupo de niños a las líneas de alta tensión más cercanas. Los resultados obtenidos han expuesto que los niños con domicilio a un radio de 200m de tendidos eléctricos tienen un 70% más de posibilidades de sufrir leucemia infantil que los que lo tenían a 600m. Esta consideración, junto a otras que demuestran la aparición de diferentes cánceres, no solo en niños sino en adultos, supone el cambio por la IARC de la consideración de los tendidos eléctricos de posibles agentes cancerígenos a cancerígenos.
2. Aumento de cefaleas y trastornos en el sueño en función de los estudios desarrollados por la Universidad de Oxford. Esta causa junto a la anterior han llevado a la Federación Española de Municipios y provincias y al Ministerio de Sanidad a solicitar estudios epidemiológicos en poblaciones expuestas a campos electromagnéticos.
3. Corta de arbolado, afectando a los encinares de la Sierra de Ávila, al LIC de la ribera del Adaja, que llega hasta el parque del Soto, uno de los espacios naturales más emblemáticos y cercanos a la capital y a los rebollares y pinares próximos a Navalperal de Pinares.
4. Pérdida de calidad paisajística de todo el ámbito territorial afectado, lo que repercutirá entre otras, en actividades económicas en auge como el turismo rural.
5. Choque y electrocución de aves, alguna de ellas gravemente amenazadas, pues el Valle Amblés es un corredor ecológico entre la Sierra de Ávila y las Sierras de la Paramera y La Serrota.
6. Fragmentación del territorio y eliminación de la cubierta vegetal, provocando la aparición de especies herbáceas, muy pirófiras, lo que hace aumentar el riesgo de incendio forestal.
7. Punto de partida para que el territorio, al ya sufrir un impacto de tanta envergadura, se convierta en un espacio en el que puedan acumularse nuevos impactos.
Esperamos desde la Asociación Geográfica Ambiental, aplicar el dicho de que rectificar es de sabios y que las administraciones implicadas, Junta y Diputación hagan caso a aquellos a los que representan, los ciudadanos, y trabajen por un bien común, nuestra salud y el medio ambiente.

APERTURA DE PISTAS FORESTALES EN LA SIERRA DE LA PARAMERA


La Asociación Geográfica Ambiental ha denunciado la apertura de varias pistas forestales en la Sierra de la Paramera, destacando la situada en las inmediaciones del pico de la Hoya (Joya) o de la Serradilla de 2134m, al ser visible incluso desde las inmediaciones de municipios como Solosancho, produciendo un considerable impacto paisajístico. Una de las pistas, grandes dimensiones parte de la que existe a una altitud ligeramente menor, para volver a unirse con ella, por un trazado en cuya parte central se ha destruido uno de los principales arroyos y cervunales, junto a uno de los principales neveros de la sierra.
Desde la asociación exponemos que las nuevas pistas suponen una alteración en los ecosistemas de la alta montaña abulense formado por piornales, enebrales, cervunales y praderas en las pasta el ganado, y en las que aún es posible encontrar un amplio mosaico de especies sobre todo vegetales y en menor medida animales. Esta rica biodiversidad les ha hecho merecedoras de ser declaradas Paisaje Protegido y Lugar de Interés Comunitario (LIC) además de contener Hábitats Prioritarios de Interés Comunitario incluidos en la Directiva Europea 92/43/CEE, por lo que este tipo de actuaciones deberían estar reguladas por la Junta de Castilla y León y por el Asocio de Ávila para evitar la pérdida de sus valores naturales.
Además añadimos que estas agresiones producidas en la Sierra de la Paramera se unen a las sufridas años atrás a consecuencia de una inadecuada política de reforestaciones realizadas con mecanismos tan agresivos para la vegetación y el suelo como son los aterrazamientos. A ello se suma que las especies plantadas han sido casi exclusivamente pinos lo que, entre otros perjucios, puede hacer aumentar el riesgo de incendio ante la gran cantidad de restos de ramas y hojarasca acumulada y la ausencia de una necesaria torreta que vigile una eventual aparición del fuego. Por ello demandan la plantación mixta con un número considerable de frondosas como álamos temblones, abedules, serbales de los cazadores y sauces en espacios cercanos a los arroyos, respetando siempre los cervunales y prados.
Por último los miembros de esta asociación recuerdamos que el tránsito por estas pistas está restringido a vehículos de motor por lo que no se entiende la apertura de nuevas pistas, al no responder a ningún fin concreto.